Luces y sombras de la publicidad veraniega
El otro día charlando con Román analizamos algunos aspectos de la publicidad televisiva de este verano.

El mejor anuncio, a mi juicio, es el del tío disfrazado de pulpo, de la Pecsi. La genialidad del susodicho estriba en lo absurdo del planteamiento, la ordenación inversa en el tiempo de los acontecimientos que forman la conquête de la femme, la canción de Bonnie Tyler, lo cutrón que es el disfraz (mención especial para los ojos saltones) y cuan discordante resulta éste en un ambiente de modelos hieráticas y fotografía nítida de revista de decoración de interiores. Pues eso, que mola, coño.

El peor (es decir, el mejor en el ránking de lo malo) es el del barbas que proclama que está harto de beber siempre los mismos refrescos y que por ello va a enterrarse el bolo en la arena mientras hace la vertical. La marca anunciante es PMI, cómo no. PMI nunca defrauda en cuanto a tercermundismo en sus espots, cosa que también es meritoria.



Es curioso que los buenos anuncios, como el del pulpo, acaban perdiendo la gracia y la sorpresividad a la que los ves media docena de veces. En cambio los anuncios malos se vuelven cada vez más tolerables y risibles en su zafiedad cada vez que los ves, como pasa con el de PMI.


Hoy, no sé por qué, me he acordado del anuncio de un coche (ni idea de qué marca o modelo) en el que salía un chico y una chica en los asientos delanteros del vehículo. El chico le explicaba el funcionamiento de un cacharro (algo así como una práctica de asignatura de industriales) mientras la chica lo miraba fijamente con cara de cordero degollado. Al tío no le daba ni tiempo de soltar: "El émbolo planetario se caracteriza por..." porque la chica lo cortaba y con pasión contenida le espetaba: "¿Quieres hacerme el amor?". Y con eso anunciaban un coche. Yo creo que ese fue el principio de los anuncios de coches misteriosos. Pero más que retener el coche, lo que uno deseaba era saber qué coño era un puto émbolo planetario y si era un talismán o un sortilegio infalible para calentar a las chicas.

- posteado por Guille Martínez-Vela 1/4 @ 12:55 p. m.

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