Dum-dum-dum... Mr.Sandmaaan...
Hoy he soñado algo memorable. Tanto, que por alguna extraña razón he sido capaz de retener ese fragmento onírico y regocijarme recordándolo en estado de vigilia.
Estoy en el patio donde aparcan los autocares de mi antiguo colegio, el suelo es asfalto no demasiado bien mezclado, al fondo quedan los edificios de la escuela, de persianas naranjas y paredes de chapa pintada de verde, precedidas por porches de vigas granate, y tras la reja de entrada se avista la Casa del Moro (un lugar misterioso en el que algún día tengo que infiltrarme si de verdad quiero darle un sentido a mi vida). Hasta aquí todo es normal, todo es cierto, todo esto existe (si es que no lo han reformado todo por completo desde la última vez que lo vi). De repente se empieza a acercar hacia mí una comitiva fúnebre poco numerosa, un ataúd negro y lujosamente lacado es portado por unas pocas personas. Un monaguillo muy joven, vestido de rojo y puntilla, precede al féretro sosteniendo un extraño báculo muy alto que me da más sensación de paganismo que de otra cosa. No conozco a ninguno de los integrantes del grupillo fúnebre, pero en mi mente se forja la idea de quién pudiera ser el finado: el director del colegio, nonagenario excéntrico y déspota, endemoniadamente activo a pesar de su edad pero no inmortal. Cuando la caja está a punto de franquear una entrada entre dos setos (dan bolitas naranjas que siempre he creído venenosas) que da a un patio con canastas y una red de volley, empiezo a sentir bastante impresión y lamento. Entonces los portadores dejan el ataúd en el suelo, se abre la tapa y de dento sale ¡Chewbacca!, que rápidamente se pone en pie y empieza a zarandear por ahí. Mientras contemplo la escena me parto la caja, es decir, me río mucho. Yo que creía que había fallecido el Sr. R. y resulta que no, que el féretro contenía a un wookie peleón. Y ahora, y despierto, me sigue haciendo mucha gracia el asunto, aunque carezca completamente de sentido.

Por cierto, el_Edgar (tal vez lo recuerden de historietas publicadas en el fanzine Los Miserables) inició hace unas semanas un curioso blog en el que narra sus sueños e impresiones en la dimensión onírica. Y lo escribe en estupendo inglés, con dos cojones como balones medicinales: Durmiendo con la Winona Ryder
- posteado por Guille Martínez-Vela 1/4 @ 9:47 p. m.

Comenta la jugada, payo: