Attaquez ces chevaliers!!
Hoy en una entrevista de Joan Barril al exministro y expepero Manuel Pimentel se ha comentado una idea curiosa y a mi juicio acertada.
Los estados de derecho occidentales, fundacionalmente basados en los principios de la Revolución Francesa -Libertad, Igualdad y Fraternidad-, hace ya unos años que tienden a estar regidos por un triunvirato diferente de principios: Libertad, Seguridad, Prosperidad. O mejor ordenado por importancia: Seguridad, Prosperidad, Libertad.

Seguridad: defensa preventiva del anónimo y sempiterno enemigo, que ya puede ser el terrorista superstar, un país entero o el vecino del tercero del que no le conoces oficio.
Prosperidad: crecimiento económico, fundamentalmente basado en la inercia consumista en la que se basa nuestro mundo tal y como lo conocemos.
Libertad: acatados todos los medios para asegurar los dos principios precedentes en forma de cesión de gran parte de tu libertad, puedes hacer lo que quieras dentro de la ley. De forma implícita, si tus acciones y pensamientos -aunque emanen de tu libertad individual- disienten demasiado de las de los conservadores rama dura, que son los que tienen montado el chiringuito, estás poniendo en peligro su sistema y te pueden tachar de enemigo de los principios de Seguridad o Prosperidad en un tris.

Nota anticipatoria a los tiempos que vivimos: la persecución ciega e irreflexiva del enemigo sin forma, objetivo de la Seguridad, es un importante agente para permitir la Prosperidad rápida y continuada en determinados mercados. La mayoría de ciudadanos, no beneficiarios directos de estos mercados, empleará su Libertad en intentar ingresar en dicha élite.




- posteado por Guille Martínez-Vela 1/4 @ 7:44 p. m.

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