Aputamiento


Algunos de ustedes tal vez conozcan una extraña afición compartida por los miembros de este blog y nuestros amigos cercanos: la contemplativa y parapsicológica búsqueda de aputamientos.

Existe en Barcelona un prestigioso, lujoso, elitista y subrepticio puticlú (cuyo nombre obviaré en este post para no buscarnos problemas, sólo diré que sus iniciales se corresponden con las de un partido político conservador español) situado en una calle emblemática, concretamente un paseo que atraviesa toda la zona alta barcelonesa (es una calle buena y nueva, no puedo especificar más). Es tradición que tras hincharnos de patatas bravas y cervezas en el Bar Tomás recalemos durante algunos minutos en la calle, frente a la fachada de tan discreto y selecto puticluc. El reto consiste en esperar el avistamiento de alguna socia del local entrando o saliendo por el portal. Este hecho recibe el nombre de aputamiento.

Ayer jueves, tras degustar unas croquetas de pollo deliciosas en el bar del camaleón de Plaça de Sarrià, Jordi 1/4, Pitiflí, Keystorm y yo nos decidimos a intentar realizar algún aputamiento. La paciencia, el azar y el puntillo de la Voll Damm son las únicas herramientas de que dispone el aputador. Tras unos cuantos minutos el milagro se cumplió: aputamiento al canto.

Spielberg en su famosa peli hace hincapié en los tres tipos de encuentro:
Close Encounter of the First Kind - Sighting of a UFO.
Close Encounter of the Second Kind - Physical Evidence.
Close Encounter of the Third Kind - Contact.

La clasificación de "Encuentros en la tercera fase" es perfectamente trasladable al mundo del avistamiento de meretrices de lujo, de hecho el Tercer Tipo queda mejor definido para este caso que para con alienígenas, creo yo.
Anoche tuvimos la ocasión de ser testigos de un aputamiento "of the Second Kind", puesto que no sólo visionamos el ente en cuestión, sino que las pruebas sobre su autenticidad son bastante concluyentes: salió escopeteada de un taxi y a trote legionario se metió en el portal, su atuendo -sin ser vulgar o cantón- concordaba con su actividad laboral.

*Piiiii-puuuuu-piiiii-puuuu-píiiiiii*
- posteado por Guille Martínez-Vela 1/4 @ 12:09 p. m.

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